Con mucho, el gran número de enfermos de Lupus son mujeres jóvenes (especialmente las adolescentes y las veinteañeras). La mayoría de los clínicos de todo el mundo consideran que las mujeres enfermas exceden en número a los hombres en 9 sobre 1.
Aunque cualquier grupo de edad puede verse afectado, el Lupus rara vez se diagnostica en pacientes mayores de 45 años. Más específicamente, en las mujeres, el Lupus es raro antes de que empiecen los períodos menstruales en la adolescencia, y muy raro después de la menopausia.
Dicho esto, es muy habitual ver a una paciente, diagnosticada por primera vez a los veinte años, que recuerda haber sufrido "fiebres reumáticas" o "dolores producidos por el crecimiento" en la adolescencia. Tales casos subrayan la idea actual de que la tendencia a padecer Lupus es en parte heredada, pero la enfermedad está inactiva hasta que se manifiesta por ciertos factores.